Adaptación del hogar al estilo de vida del futuro
La vivienda de la nueva era se construye llena de tecnología y con materiales no contaminantes, duraderos, reutilizables, reciclables y reparables

¿Quién se hubiera creído que toda nuestra vida, nuestras fotos, información, tarjetas de crédito, mapas y relaciones estarían en un “aparato” de 15 centímetros? Estos cambios en el estilo de vida se asimilan cada vez en menos tiempo debido a la velocidad a la que se avanza la tecnología, que no mira hacia atrás. Esto también se aplica a nuestro refugio, nuestro hogar, que evoluciona a través de esta ciencia para hacer la vida más fácil. El claro ejemplo es CyberHut, la vivienda de la nueva era, diseñada y construida para afrontar los retos de las generaciones futuras, basándose en sus investigaciones de vida en hábitats extremos como Marte.
Con esa premisa, ¿cómo debe evolucionar la vivienda para acomodarse a las necesidades de quienes la habitan? La sociedad, especialmente los jóvenes, se enfrentan a un nuevo paradigma más difuso e incierto, en donde la flexibilidad y la incertidumbre difuminan la idea de planes a largo plazo, pero en el que se valora más el presente, tiempo, la salud y el cuidado del medio ambiente para asegurarse, precisamente, un futuro. Así, modulable y personalizable, CyberHut nace bajo la idea de que la persona es el centro y esta se construye en torno a ella, respondiendo con la tecnología a los retos de las nuevas generaciones y un estilo de vida que no es sostenible.
Uno de los retos que afronta la humanidad es ser más sostenibles, donde no valdrá con dar un paso más, sino avanzar a zancadas. Una de las ideas que se han puesto sobre la mesa es el autoabastecimiento y reducir la huella de carbono al mínimo. CyberHut es el claro ejemplo de vivienda autónoma, capaz de generar su propia energía y almacenarla, de producir alimentos y reciclar y almacenar el agua. Para ello, utiliza placas solares de alto rendimiento y almacenaje para su uso sin necesidad de conexión; se sirve de un sistema que capta el agua pluvial y de la humedad relativa que gestiona el ciclo integral del agua mediante tres redes de aguas blancas, negras y grises, reutilizando el agua de ducha y lavabos para regadío; o de sistemas de cultivos hidropónicos para comer lo que producimos.
Las nuevas generaciones no piensan en planes a largo plazo y han madurado con la libertad de movimiento, bien por su espíritu libre o por la búsqueda de oportunidades. Esto deberá estar presente en el lugar que ocupen. Así, utilizando los avances tecnológicos, CyberHut se presenta como una vivienda totalmente flexible, ideada para personalizarse a las necesidades de cada ocupante, no solo en la disposición de su facilidades y estética, también en cualquier momento o actividad. Por eso, este espacio de 50 metros cuadrados es capaz de mutar y computar como uno de 200, y quien lo habite podrá elegir diversas funcionalidades, como la instalación de una estación gamer, gimnasio o bar.
Dentro de esta flexibilidad, CyberHut plantea el pago por uso para facilitar el acceso de los jóvenes a la vivienda, así como la posibilidad de cambiar su ubicación en cualquier momento, permitiéndoles disfrutar de este hogar sin permanencia o de estar anclado en un punto fijo.